La fragilidad de la perfección

03.04.2014 10:27

¿Os habéis fijado alguna vez con qué perfección estamos hechos? Venía paseando al trabajo cuando una polvareda en la calle me ha hecho toser. Ese pequeño malestar de apenas diez segundos me ha hecho recordar la suerte que tenemos al poder disfrutar plenamente de los detalles de la vida, sin apenas ser conscientes de que algo en nuestro interior podría fallar de un momento a otro.

Respirar, oler, caminar, correr, sentir… facultades tan básicas como éstas necesitan el ensamblaje minucioso de miles de piezas delicadas y extremadamente vulnerables. El ensamblaje y un funcionamiento armonioso. Lo que verdaderamente es un milagro es que día tras día nuestra máquina no muestre averías graves. Evidentemente hay excepciones, pero aun así el peso de la “perfección” sigue siendo notable.

Hay un anuncio de coches en España que dice algo así como: “Somos máquinas perfectas y estamos hechos de la misma materia que los sueños”. Este eslogan realmente tiene mucho fondo: “máquinas hechas de sueños”, complicada combinación. Así somos nosotros, una complicada combinación de milagro y ciencia.

Al igual que nuestra maquinaria está diseñada para ser perfecta, también nuestra mente es un maravilloso artefacto de impecable ingeniería. Si aplicamos el método deductivo podemos concluir que: si nuestro cuerpo está hecho para funcionar perfectamente, nuestra mente también, ya que forma parte de nuestro cuerpo. Entonces, para que nuestro cuerpo esté perfecto nuestra mente debe estar perfecta. Esta afirmación parece simple y ridícula, pero si nos fijamos bien estamos considerando implícitamente que aquellos cuerpos que no funcionan de forma correcta no poseen una mente que funciona de forma correcta. Desde mi punto de vista es un punto de atención remarcable.

¿Podemos aplicar esta conclusión en todos los casos? Es decir, las enfermedades “físicas” que nadie espera tener pero que en cualquier momento pueden aparecer en nuestras vidas, ¿son debidas a una mente no perfecta? O, ¿podrían corregirse/curarse si nuestra mente fuera perfecta?

Personalmente creo que algunas enfermedades nos atizan sin un aparente motivo psicológico/neurológico/mental. Sin embargo, apoyo la idea de que podríamos lograr la curación valiéndonos de nuestra mente perfecta. Este aspecto implica un avance científico/neurológico prácticamente inconcebible en nuestros tiempos. Creo que la neurología es una disciplina clave para evolucionar en esta teoría, aunque debería integrar otros conceptos “menos experimentales”, como por ejemplo, la espiritualidad. La espiritualidad se centra en nuestra energía, y como tal, cada vez está siendo mejor acogida por la física. Bien. Creo que estamos en el buen camino.

Cuando la neurología, la psicología/psiquiatría, la física y la espiritualidad converjan en una teoría multidisciplinar, estaremos cerca de conocer la potencialidad de nuestro cerebro/mente. Cuando esto ocurra el milagro de la existencia humana surgirá. Espero que para entonces los seres humanos estemos capacitados para ser dueños de tanto poder.
 

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